Desde hace unas semanas, estoy comprando el diario El Mundo los viernes y sábados, ya que trae una colección de Clásicos del Pensamiento bastante interesante. Los sábados, el diario trae la revista Yo Dona. No soy muy aficionada a las revistas femeninas, pero ya que la trae, pues suelo ojearla.
El pasado sábado me encontré con un artículo que consistía en la publicación de fragmentos de un libro llamado “Cartas desde el maltrato”, un libro elaborado a partir del diario de una mujer maltratada. Os dejo el enlace en YouKioske por si queréis leerlo online, está en la página 34. Para leerlo, haced clic aquí.
No sé si a las que lo hayáis leído os habrá llamado la atención lo mismo que a mí: la actitud de sus amigas y la gente que le rodea hacia ella: no se creen que su marido la trate tan mal, no creen que sea violento, básicamente, porque fuera de casa no es así. Imaginaos la situación en la que se encuentra una mujer que acude a sus amigas pidiendo ayuda y se encuentra con que le quitan importancia a la situación, no la creen, o directamente la llaman exagerada. Esto era una situación bastante común hace no demasiado, pues hasta hace poco perduró la creencia de que “hay que aguantar” o “algo habrá hecho” (terrible).
Creo que por suerte, esta situación ha cambiado bastante. Creo que estamos más sensibilizados ante los problemas de malos tratos. Si hoy una amiga viniese y nos dijese que la maltratan, le ofreceríamos toda la ayuda que estuviese en nuestra mano. Y sin embargo, quedan restos. ¿Alguna vez vuestras amigas han defendido a vuestra pareja en vez de a vosotras?
En fin, esas cosas pueden ser anecdóticas, sólo quería dejar constancia de cómo ha cambiado la actitud. Aunque sería mejor dar importancia a las cosas que la tienen desde el principio, y no esperar a que se sucedan las desgracias. Y esto puede aplicarse a muchas cosas, no sólo a los malos tratos.
Hola chicas. Ya estamos en primavera, bien cerquita del verano, y ya se notan que los rayos del sol empiezan a ganar fuerza. Estamos muy concienciados con el tema de la protección solar cuando hablamos de la piel, pero ¿qué pasa con la vista? Al igual que la piel es un órgano extremadamente importante, en tanto que nos protege de agresiones externas, los ojos son el sentido primordial con el que la mayoría nos relacionamos con el mundo, por lo que protegerlos también es muy importante. Además, proteger los ojos del sol evita que los “entrecerremos” y así evitamos, en cierta medida, la aparición de “patas de gallo”.
La mejor manera de proteger los ojos es el uso de gafas de sol, siempre adecuadas a la situación de luminosidad en la que nos encontremos. Normalmente, en el lado interior de una de las patillas, o en algún documento que venga con las gafas de sol, viene señalada la categoría de las mismas:
Categoría 0: Luminosidad atenuada
Categoría 1: Luminosidad contrastada
Categoría 2: Luminosidad media
Categoría 3: Luminosidad alta
Categoría 4: Luminosidad excepcional (montaña, playa, esquiando…)
Y ahora os respondo a la pregunta…
Bettie dice:
La verdad es que para el cuidado que tengo yo con mis ojos – tener problemas de visión desde los 4 años te conciencia a la fuerza – en lo de las gafas de sol soy un poco perezosa, sobre todo en invierno. Principalmente, porque si las gafas de sol no son graduadas, no veo a un palmo de mis narices, y en segundo lugar porque no me veo bien con gafas de sol, llamadme rara. De todas maneras, a raíz de empezar a usar lentillas, comencé a usar gafas de sol, sobre todo cuando la luminosidad era más fuerte, porque el sol me molestaba más.
Sin embargo, y aunque yo no me veo bien con las gafas de sol, veo a gente que le quedan fenomenal, y creo que son un buen complemento, y que últimamente hay modelos mil para acoplarse a todos los estilos.
¿Y vosotras? ¿Usáis gafas de sol? ¿Las consideráis un complemento y tenéis varias, o solo unas?
Este post también tenía, por objetivo, enseñaros mis gafas de sol. Las primeras, son el modelo “Aviador” que venía con la revista Woman. Hace tiempo que tenía ganas de unas gafas de este estilo, aunque me hacen cara de malota.
Esas iban a ser mis gafas para el verano – tiene categoría 3 – pero ayer recibí, sin esperarlo, un paquete, cortesía de Bodybell. Dentro, encontré esto…
Unas maxi-gafas de sol, de estilo bastante redondeado –muy retro, creo yo- dentro de un estuche bastante fuerte con interior y gamuza rosa. Muy mono todo, ¿no creéis? También son categoría 3, así que me vendrán muy bien para este verano. Además, como son muy distintas de las otras, podré cambiar :)
Este modelo de gafas de sol van a regalarlo durante el mes de abril por compras superiores a 65 euros para los miembros del club BBF o superiores a 70 euros para el resto. Así que, si os han gustado, podéis aprovechar el regalo del día de la madre para haceros con estas gafas, o para complementar el regalo de vuestra mamá, claro que sí :)
Espero que no se os haya hecho muy rollo este post.
Los contenidos de este post, tanto texto, como video, pueden resultar incómodos o desagradables. Duros, sobre todo. Considero que es mejor que os avise.
Últimamente se está moviendo mucho revuelo con lo que se ha llamado por ahí “baby-gurús”: niñas bastante jovencitas, es decir, pequeñas, que suben videos a Youtube sobre maquillaje, moda, y demás, entre otras cosas. Y el término “baby-gurú” ya no es exagerado: he llegado a ver videos de niñas de 5 años hablando de maquillaje. Las youtubbers de belleza y moda se han movilizado mucho, y ya sea vía Twitter, vía Facebook o a través de sus canales han intentado concienciar a la gente a la que llegan de los peligros de esta situación. También las bloggers hemos intentado sumar nuestro granito de arena a esta causa, escribiendo post sobre el tema. Pero la cosa, lejos de pararse, se está convirtiendo en un fenómeno de masas infantiles, y no tan infantiles. Lo único que les faltaba a estas “baby gurús” era un poco de eco mediático, cosa que llegó cuando el Jueves 31 de Marzo Antena3 subía a su web esta noticia:
(espero que no hayan borrado la noticia de la web para cuando leáis esto)
Estamos hablando de una niña de 9 o 10 años. Menudo patinazo lo de Antena3, para qué decir otra cosa. Pero desde luego, si estas niñas quieren llamar la atención y “hacerse famosas” ya tienen la señal que querían.
Cuando ocurren estas cosas, lo que nos preguntamos es: ¿Dónde están los padres? ¿Por qué dejan a una niña pequeña sin vigilancia ante un ordenador con acceso a Internet? Pues lo más triste de todo esto es que muchos padres lo saben. Y lo permiten. Y les compran “pinturitas” y “cremitas” a las niñas para que “jueguen” con ellas. Rescato algo que dijo Eva, La colorópata, en Twitter, en una ocasión, mientras se hablaba de este tema: habría que hacer un examen para ser padres.
Pues hoy vengo con el más difícil todavía: estas niñas toman la decisión de exponerse en Internet, sin saber la cantidad de peligros, y sus padres las apoyan. Ahora, hablemos de padres que conducen a sus hijas a comportarse como modelos adultas y exhibirse ante una gran cantidad de personas. Hablo de los concursos de belleza infantiles. Ya sabéis que los americanos en estas cosas nos llevan mucha ventaja – y eso no tiene por qué ser bueno. Mientras el mundo se escandalizaba por el editorial de Vogue Francia en el que aparecían niñas maquilladas como mujeres (podéis leer un post sobre ello aquí) en Estados Unidos las madres preparan a sus pequeñas para convertirlas en auténticas muñecas tenebrosas de museo de cera, como escribió Subflava en este post.
Los concursos de belleza infantiles mueven un dineral en Estados Unidos. Las niñas empiezan a desfilar en ellos muy pronto – ¡incluso antes de poder caminar solas! – y normalmente continúan en ellos hasta la adolescencia o incluso hasta la mayoría de edad. Son esclavas de la belleza, la moda, la postura, las dietas desde siempre. Imaginaos la presión a la que se somete una top model cayendo sobre una niña de 6 años.
Pues bien, aparte de los ya famosos y controvertidos concursos infantiles, también están los REALITIES de concursos infantiles de belleza. Tenemos, por ejemplo, Little Miss Perfect:
PROMO (no la he encontrado en castellano, lo siento chicas :(
Ya la promo se las trae, las madres hablando por la boca de las niñas y dando las razones por las que las llevan a este tipo de concursos: para aprender a manejar la presión, para hacer amigas, … Da que pensar, ¿verdad?
Una transformación de una participante en este programa…
Y la presentación de mamás y niñas:
De la primera mamá me encanta cuando dice: “Oh, es que me siento mal cuando no para de decir ‘lo siento’ porque es como si lo hiciese por mí más que por ella…” … ejem
De la segunda mamá cuando la niña dice que está cansada y ella le insiste.
De la tercera, que compare esto con llevara tus hijos a jugar al futbol. Interesante.
Para que acabéis de morir os dejo este video de otro programa parecido, “Toddlers and Tiaras”, en el que una madre obliga a su niña pequeña a hacerse las cejas con cera, a pesar de las protestas y lloros de la pequeña. Puede herir sensibilidades. (Aprovecho para decir que doy gracias a mi madre por atrasar mis inicios depilatorios lo máximo posible :P)
Por si alguien sigue viendo todas estas cosas como algo inocente, os acabaré de amargar el día con una historia que puede que conozcáis, la de JonBenét Patricia Ramsey, una reina de belleza infantil que fue asesinada, cuyo caso todavía no se ha resuelto. Se ha apuntado a los padres como autores del asesinato, pero parece que los indicios apuntan a que algún pederasta, obsesionado con la niña, la secuestró, abusó sexualmente de ella, y después la mató (perdón por esta parte…). Con historias como estas, no entiendo como los padres exponen así a sus hijas. Y tampoco entiendo como permiten que estén delante de un ordenador, alegremente, compartiendo datos personales, o exponiendo su imagen. No es un juego, como veis, es realmente peligroso.
En fin, que yo no quiero reflexionar mucho más sobre esto, supongo que ahora mismo todas vosotras tendréis una sensación de malestar por la que os pido perdón. Pero como siempre, mi intención es concienciar a padres, familiares, hermanas mayores… Si las queréis, protegedlas. Una vez más, os dejo enlace a la web Protégeles.
Pero bueno, para que no os quede mal sabor de boca, os dejo la escena final de “Pequeña Miss Sunshine” (en inglés, no la encontré en castellano :( ). Una peli que trata este tema con mucho humor y que os recomiendo.
Un saludo, y de nuevo, perdón por el tono del post de hoy. Para que luego digan que somos frívolas y superficiales, ¿eh?
-Moli nos hace una review sobre una base de Nyx que a mí me ha tentado bastante: la HD Studio Photogenic.
-Hace poco puse en Facebook un comentario sobre un programa de televisión del que Gadirroja se ha hecho eco, y ha reflexionado sobre el colecho sí, el colecho no, y el colecho “por webos”.
- Morgan, de Mi maquillaje y otras frivolidades, nos presenta uno de esos tesoros, buenos, bonitos y baratos que tan bien nos vienen en estos tiempos: el tónico de Aloe de Babaria.
-En este post de Papishpolis se nos cuenta una experiencia nada agradable con su piel y cómo acabó solucionándola: con un descubrimiento de urgencia.
-BloodyRose, de Make-Up in Rose nos hace un duelo de paletas, con pros y contras. Así es mucho más fácil elegir, ¿no creéis?
Esta semana he leído los blogs muy “en diagonal”, vamos, que me habré perdido mogollón de cosas. Si creéis que hay algún post que merezca la pena y que no he puesto aquí, decídmelo, porque puede que ni lo haya visto :P
Como ya os dije en una entrada, cuando se acabó mi Avene Hydrance Optimale Ligera, me fui a la farmacia, y tan contenta como estaba con ella, decidí probar otra hidratante más básica. Pensé: “Bueno, ahora que tu piel ya está rehidratada y equilibrada, busca una hidratante monda y lironda de la misma marca, que seguro que te va bien.” Pues sólo os diré una cosa…
¡Si es que soy una pringada! ¡Con lo bien que me había quedado la cara con la Hydrance Optimale Ligera! ¿Quién me manda a mí a hacer experimentos? ¿Eh? ¿Eh?
Bien, tras los primeros días de uso no noté nada. Estaba bastante contenta con la hidratante, porque igual que la Hydrance Optimale Ligera, se absorbía muy rápido, dejaba la piel bastante hidratada, mate, su textura era agradable… En fin, que no tenía queja. Pero a medida que pasa la primera semana, me voy notando la piel más seca. Cuando me lavo la cara, noto la piel más tirante. Y no le doy importancia, lo achaco a que han bajado las temperaturas, … Sigo usando la hidratante. Después de tres semanas, empiezo a notar la frente súper seca e incluso empiezan a levantarse escamitas de piel. ¿Pero esto qué es?
No sé cómo irá para pieles más grasas, pero que conste que no se trata de un producto específico para pieles grasas, sino de un producto incluido dentro de la línea de tratamientos esenciales de Avene, orientado a pieles normales – mixtas. Mi piel, como ya os he dicho mil veces, y perdonad que me repita, es normal, con algo más de producción de grasa en la nariz y alrededores, pero poco más. Solo buscaba una hidratante, ni más, ni menos. Y desde luego este producto no cumplió mis expectativas. Realmente esta hidratante se queda muyyyy corta en lo que a hidratación se refiere.
En fin, como no todas las pieles son iguales, y puede que a alguien sí le vaya bien, os diré que el envase es de 50 ml y que me costó algo más de 18 euros. Un precio que después de usarla sí me dolió realmente, porque ponerse esta hidratante y no ponerte nada, más o menos lo mismo. Por poco más encontramos otras hidratantes mejores, más completas – lo que no quiere decir más pesadas. La próxima hidratante que probaré, en cuanto acabe con la de Decléor, será la Gelée Eclat du Jour de Clarins (22€ aprox.), de la que he oído/leído muy buenas críticas. ¿Alguna la ha probado?
En fin, perdonad el tono de esta reseña, pero realmente cuando inviertes dinero –aunque no sea una barbaridad- en un producto y luego lo tienes que desechar porque te estropea la piel ¡da una rabia!
¿Alguna de vosotras ha probado este producto en concreto? ¿Os ha ido “tan bien” como a mí?